Crónicas políticas: lo impensable (crisis en Bolivia, la renuncia)
Lo acontecido en octubre de 2019 en Bolivia, es el fruto de un paulatino desgaste del sistema político, y de la imagen de Evo Morales, único garante del éxito desmedido del proceso de cambio. Ante la controversia de los eventos, quedarse callado cual pasivo espectador, es una tarea bastante complicada, por no decir imposible. Entre el repudio y la admiración, el gobierno de Morales sigue dividiendo, no solo a los bolivianos, también a la comunidad internacional; debates candentes, copioso intercambio de insultos, narrativas contrapuestas, discursos exacerbados, categorizaciones políticas, marbetes rimbombantes. No deja de ser fascinante todo este revuelo mediático, pese a que la situación boliviana es bastante crítica. La encrucijada; crisis política y social, algo recurrente en nuestra historia, cuyos ciclos altamente precisos dejan desconcertado a más de un analista. Parece que estamos condenados a repetir los mismos errores; Bolivia de cuando en cuando se va al diablo, esa es l